viernes, 5 de octubre de 2018

Africa, Revista de Tropas Coloniales



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Publicación continuadora de la Revista de tropas coloniales (título este que pasa a ser el subtítulo) que fundara en Ceuta, en enero de 1924, el general Gonzalo Queipo de Llano (1875-1951), junto al entonces teniente coronel Francisco Franco (1892-1975), que desde enero del año siguiente venía apareciendo como su director, además de uno de sus articulistas. El nuevo título lo adopta en febrero de 1926, continuando la numeración del predecesor, y manteniendo asimismo la misma estructura formal y la naturaleza de sus contenidos, tanto por sus textos como por sus destacadas y bellísimas ilustraciones, como “propagadora de estudios hispano-africanos”. El nuevo título aparecerá tímidamente reducido en su cubierta, hasta que en enero de 1927 –en su tercer año de publicación- adquiere tipográficamente relieve, manteniendo al mismo tiempo el subtítulo “revista de tropas coloniales”.

Ya en 1925, cuando Franco había sido promovido al empleo de general de brigada por “méritos de campaña”, había puesto a disposición su cargo de director de la revista ante la posibilidad de ser destinado por el Gobierno a algún territorio de la península, pero tales circunstancias no impidieron a Franco seguir desempeñado “tan acertada y brillantemente como hasta el presente la dirección y orientación” de la revista, y continuará apareciendo nominalmente como su director hasta enero de 1929, reapareciendo posteriormente como tal en otro periodo de la misma.

La revista seguirá siendo el órgano orientador del militarismo africanista que había anidado en el Protectorado español en Marruecos y que había roto drásticamente con el anterior africanismo español de la Restauración, y cuyo grupo formará el grueso de jefes y oficiales conspiradores que más tarde convergerán en el golpe de Estado del 18 de julio de 1936. El director artístico y principal autor de las bellísimas ilustraciones (dibujos y acuarelas) tanto de sus cubiertas –estampadas a varias tintas- como en su interior sigue siendo el pintor granadino Mariano Bertuchi (1884-1955). Como redactor jefe y otro de sus principales articulistas aparece Antonio Martín de la Escalera; como secretario de redacción, J. Ortega Costa, y como administrador, J. María Miró Bernat. Siguen perteneciendo a su cuerpo de redacción Tomás García Figueras, Enrique Arques, Clemente Cerdeira, Cándido Lobera, Andrés Allendesalazar, Fermín Villalta, Rodolfo Gil (Amor Benomar) o F. Hernández Mir, junto a articulistas como Julio Mena Zueco, Juan Santillana, Francisco Sureda Blanes, J.M. Vizcaíno, M. Álvarez Salamanca, C. López Castillejos, Gonzalo de Reparaz, Humberto F. Cortaceros Henares, Pedro Villacañas, Andrés Sánchez Pérez, J. Eugenio Ribera, César Voyer Méndez, Rafael Fernández de Castro, Joaquín Mas y Guindal, José Asensio Torrado, Santos Fernández, Rafael Candel Vila, J. Carrasco Téllez o Fernando de Carranza, entre otros muchos.

Los artículos que publica son de naturaleza variada, entre los que se incluirán los de carácter puramente militar, como los dedicados a estrategia y operaciones militares o los de carácter histórico-militar, junto a los dedicados a divulgar la historia, economía, cultura, sociedad, costumbres o geografía de las distintas zonas y ciudades marroquíes. Mantiene también secciones como la Revista de libros, La España musulmana, Marruecos pintoresco y Marruecos artístico, y muchos de sus números serán iniciados con una serie bajo el título El Estrecho de Gibraltar, episodios principales de una tragedia histórica, que escribe Gonzalo de Reparaz.

Destacan también las bellas ilustraciones que acompañan a los textos, dibujos y acuarelas del ya citado Bertuchi, junto a otras de Carlos Miciano, J. Pitarch, F. Ramos, L. Meléndez, Sáinz de la Maza, M. Benitah y Blanco, Antonio Got, A.M. Ferreres, entre otros. Destacan asimismo el gran número de fotografías que publica, como las de Bartolomé Ros (1906-1974), Palacios, Fraglia, Calatayud, Carbonell, Patiño, Torres Molina o Perera, entre otros muchos fotógrafos, de vistas, paisajes, edificios, costumbres, pintoresquismo y ciudades marroquíes, además de las que inserta sobre monumentos y edificios árabes españoles de ciudades como Granada, Sevilla o Toledo, y de tropas y retratos de jefes del ejército español en el Protectorado, todas ellas originales. Además de mapas y croquis.

La revista, como publicación de estudios hispano-marroquíes y africanos, continuó siendo estampada por la ceutí Editorial Hércules, indicado después que salía de talleres propios: Imprenta Tropas Coloniales. La dirección de su redacción y administración era un apartado de correos, contando, asimismo, con teléfono. El número 138 es el último de la colección, correspondiente a junio de 1936, cuando Franco hacía tiempo que había dejado de aparecer en la cabecera como director de una revista de la que se ha escrito que sus principales sustentadores fueron los generales africanistas e intervencionistas Queipo, Millán Astray y, especialmente, de quien pocos meses después asumirá la jefatura del Estado español, tras el golpe militar del 18 de julio de 1936. La publicación dejará de publicarse durante la guerra civil, para reaparecer en Madrid como publicación oficial en 1942, y seguir siendo editada mensualmente, a partir de 1945, por el Instituto de Estudios Africanos, adscrito al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), bajo la dirección del director general de Marruecos y Colonias, el general José Díaz Villegas, hasta su desaparición en 1978.